¿HOSPITALES DE CALIDAD?
En los más de 20 hospitales que están a cargo del GDF, prevalece el desabasto en medicamentos, material quirúrgico, material de curación y personal especializado, entre otras carencias. Además, hay pacientes que se quejan de la negligente atención que reciben de algunos médicos. Los ciudadanos afectados describen las condiciones en que son atendidos: Por la carencia de medicamentos, material quirúrgico y de curación, los pacientes deben costearlos aunque muchos de ellos -al no contar con los recursos económicos- prefieren esperar a que las autoridades hagan el abastecimiento de los mismos.
Con un presupuesto de 10 mil 980 millones de pesos para este año, más los recursos federales del Seguro Popular,, mantienen una serie de deficiencias, originadas por el poco o nulo mantenimiento tanto a las instalaciones –algunas de las cuales tienen en promedio más de cinco décadas de antigüedad– como al equipo; faltan insumos y hay una gran demanda de servicio, para atender a 4 millones de personas.
Un ejemplo de ello es el Centro de Salud Culhuacán, donde los médicos y enfermeras dicen que el administrador no les resuelve sus peticiones. Incluso los galenos han tenido semanas sin tener recetas y por tanto la farmacia no surte los pocos medicamentos que tiene.
En lo que va del año las enfermeras no tienen insumos y el equipo para revisión de glucosa en diabéticos, mientras que en el laboratorio los pacientes llegan son su sangre, orina y excremento para análisis, pero al darles los resultados se les anota que no se pudieron hacer porque no hay reactivos.
Es importante mencionar que, a diferencia de otros hospitales del GDF, el hospital Belisario Domínguez -mejor conocido como hospital de especialidades en Tláhuac-, cuenta con el material y medicamentos indispensables, además de una infraestructura de primer nivel y especialistas reconocidos a nivel nacional e internacional.
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